“Me voy a graduar con las personas que me hacían llorar. Ver como sus padres los miran orgullos pensando que criaron bien a sus hijos cuando en realidad son unos monstruos que copiaron para ganar.” Cuenta Daniela Vidal llorando mientras relata su historia.
Daniela Vidal Haas se enfrentó a un infierno al pasar a secundaria en su colegio. Sus compañeros le hacían burla por ser diferente y se burlaron de todos y cada uno de los pequeños defectos que ellos decían que tenía.
· En Guatemala, los resultados demuestran que al menos tres de cada 10 estudiantes se reportan como víctimas del acoso escolar y que este afecta más a los niños que a las niñas
Cuando Daniela entró a la secundaria nunca se imaginó que se llegaría a pelear con la líder de todos sus compañeros, creando una rivalidad entre ella y la mayoría de sus compañeros.
Daniela llegó a tener muy buenas amigas y amigos, sin embargo, ellos tampoco se metían cuando alguien estaba molestando a Daniela sin importarles que esta terminara llorando.
El tormento empezaba desde las 8:00 am hasta las 2:00 pm y a veces seguía a través de las redes sociales cuando le tocaba formar grupos con sus compañeros.
“Me sentía sola y mi mamá intentó hablar con el colegio y les dieron una sanción a esos niños, pero nunca avisaron a sus casas, eso hizo que ellos siguieran con sus burlas.” explicó mientras se limpiaba las lagrimas de frustración.
La joven explicó que la tristeza llegó a ser tanta que quiso lastimarse físicamente o perder el grado para ya no seguir con sus compañeros, sin embargo, no quería darles esa satisfacción tampoco.
“Lo que me duele, es que me iré del colegio y a ellos nunca les hicieron nada, es verdad que nunca me agredieron físicamente, pero mi estabilidad mental me la arrebataron.” Comentó la joven frustrada.
Daniela ya se encuentra en su ultimo año de colegio y comenta que sus compañeros han cambiado drásticamente, dejaron de molestarla y de hablarle, lo cual ella agradece.
“No me quejo de que ya no me molesten y tampoco pido que ahorita los castiguen, pero muy dentro de mi siento esa sed de venganza por lastimarme durante años. Yo también cambié y soy mucho mas fuerte, aunque aun sigo con esa pequeña espina en mi corazón”. Concluye Daniela mientras se rasca la cabeza.
Su mamá no la quiso sacar del colegio ya que el papá de Daniela quería que ella se gradúe en ese colegio para “seguir con la tradición de la familia”, pero nada es mas importante que la salud mental y física de un niño.
El 2 de mayo se conmemora el Día Internacional contra el Bullying o Acoso Escolar, con el objetivo de hacer consciencia sobre esta problemática que afecta a la niñez en todo el mundo.
Ana Flores
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