Hoy en día, el problema de las drogas se ha convertido en un tema muy recurrente en numerosas partes del mundo. La aparición de nuevos estupefacientes ha dado lugar a un aumento en el número de adictos.
En Guatemala, es difícil mencionar el problema de las drogas y no pensar en la ciudad capital, donde la mariguana, la cocaína, la heroína y toda droga alucinógena se adquieren como dulces en las discotecas o lugares de públicos, como las zonas 1, 10, 11 entre otras cada vez más fácil de adquirir.
Se ha demostrado la fuerte dependencia que provocan estas drogas en los individuos que la consumen, así como los problemas estructurales que genera, entre ellos la pobreza, el desempleo y la proliferación de enfermedades. La negligencia del gobierno a este aspecto es notoria.
El objetivo principal debería ser acabar con el problema de las drogas, en lugar de simplemente mejorar la vida de quienes han caído en esta adicción o en cualquier otra que esté ligado a perjudicar la salud de los guatemaltecos.
Los adictos a estos estupefacientes siguen viviendo en condiciones terribles y por desgracia, siguen siendo tratados como "criminales". Cuando el gobierno debería centrar sus esfuerzos en terminar el micrográfico y al mismo tiempo crear campañas para rescatar a quienes han sido afectados por estas drogas.
Aunque actualmente existen instituciones que trabajan con y para adolescentes con problemas de drogadicción.
Estas son de carácter gubernamental y no gubernamental en la prevención de uso y abuso de las drogas, dentro de las cuales se pueden mencionar las siguientes:
· Consejo Nacional de Prevención del Alcoholismo y Drogadicción
· Comisión Nacional Contra el Tabaco
· Asociación Nacional de Prevención, Diagnóstico y Tratamiento de las Adicciones, Asesoría, Orientación y Prevención de la Drogadicción.
A pesar de los programas mencionados anteriormente, la juventud guatemalteca sigue siendo víctima del consumo de drogas, por la falta de atención de la sociedad o muchas veces de la misma familias de los adictos que ingresan a este mundo obscuro sin retorno por la muy conocida “curiosidad”.
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