La comunidad científica trabaja día a día, para encontrar la vacuna contra el COVID-19, es el virus que el mundo entero trata de derrotar pues causa la enfermedad respiratoria que ha desencadenado la peor crisis desde la segunda guerra mundial.
Una vacuna es una forma de acabar con la propagación de la pandemia de coronavirus, normalmente los científicos se tardan de diez a quince años para desarrollar una, para el Ébola se tardaron 5 años, por lo que se cree que se puede acelerar el proceso. Se espera que en meses se pueda llegar a la conclusión de desarrollar una vacuna y aprobarla, este sería un tiempo record.
Políticos, científicos y empresas afirman que están haciendo todo lo posible para suministrarla. La Organización Mundial de la Salud (OMS) dice que hay más de cuarenta vacunas potenciales, informan que hay más de cien en desarrollo aunque solo unas pocas se están probando clínicamente.
La última y más innovadora forma de atacar el virus, es con una vacuna que manipula a una parte del virus conocida como ARN, este ARN es la molécula que lleva toda la información genética del virus, y puede ser sintetizado a gran escala en el laboratorio, por lo que se está utilizando para desarrollar esta vacuna y ya hay ensayos clínicos en curso.
Mientras el mundo espera dicha vacuna, potencialmente millones de pacientes necesitan tratamiento, los investigadores y los médicos han realizado combinaciones con los medicamentos existentes, pero hasta al día de hoy no hay cura para el COVID-19.
Hay más de treinta empresas e instituciones académicas en todo el mundo intentando diferentes enfoques para encontrar la cura para el COVID-19, se han realizado varias pruebas en humanos a pocas semanas de la rápida expansión de la pandemia, en Alemania se está trabajando en una vacuna que creen que estará lista para las pruebas clínicas en junio de 2020.
Por Ana Zepeda
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